LIDERAZGO, PARTICIPACIÓN Y DESEMPLEO
Existen pensadores, políticos y creadores de opinión que consideran que estamos faltos de líderes, de gente con el carisma o la energía necesaria y suficiente para afrontar la grave crisis en la que estamos inmersos y de la que no somos capaces de salir.
Hubo otras épocas en la historia de la humanidad en la que esos grandes líderes que resolvían los problemas, generaron más vergüenza y estupor que otra cosa y en todas las mentes están los ejemplos más sangrantes y más recientes.
Por otro lado existe quien se lamenta de falta de liderazgo tanto mundial como nacional y luego se quejan de la falta de participación que el pueblo tiene en política. Contradicción, pienso yo. El liderazgo excluye por definición la participación.
No son líderes los que regalan entradas ni los que las escamotean. Es líder quien paga todos los gastos de la fiesta, como hicieran los antiguos ediles curules romanos y Cayo Julio César quiero pensar que fue su máximo exponente. Eso eran fiestas y eso era un líder. Lo de Dani Martín es una anécdota.
Bien, lo que observo en nuestro pequeño universo local, es que tal vez exista alguna especie de génesis de líderes políticos pero por alguna razón no acaban de cuajar. Mejor. También se observa que, y por favor que todo el mundo trate de evitar el tan traído y llevado comentario elevado a la categoría de sentencia de que lo que hacían los “otros” era peor o mejor, la participación ciudadana se trata de encauzar al finalizar los plenos municipales y creo que a los que gobiernan actualmente les está saliendo muy bien. La razón no es otra que, determinados grupúsculos que no representan a nadie, insisten en usar esa rendija que les han abierto para obtener el protagonismo que las urnas les negaron. El equipo de gobierno, evita siempre el debate directo –lógico, por otra parte- y queda maravillosamente bien ante el pueblo en general al exhibir esa forma tan generosa de acercamiento al ciudadano dejándole participar, como a uno más en los plenos municipales, cuando la realidad es bien distinta.
Entiendo perfectamente que el que ha ganado las elecciones, debe gobernar y pretender hacer lo que mejor le parezca a los intereses que representa, pero por aquello de dónde está en Manzanares la participación ciudadana, me ha llamado mucho la atención el nombramiento de la nueva directora de la televisión municipal. Si no se ha enterado ni dios hasta el día en que ocupó el despacho y mira que me extraña que Dios no se haya enterado con todo lo que le ofrecen y ruegan. Y vuelvo a decir lo del párrafo anterior. Que no nos vengan con que Pozas lo hacía igual o peor. Eso ya no convence a nadie. Se les ha elegido precisamente para evitar caer en las formas de gobernar de don Miguel Ángel.
Las Jornadas Empresariales celebradas entre el 25 y el 27 de octubre, a las que tenía intención de acudir, al menos el última día, pero no me fue posible, son un exponente más de que en verdad algo se empieza a mover en la dirección que el pueblo necesita para tratar de salir de la crisis. Iniciativa interesante, pero no nos engañemos, no vaya a ser que estas cositas vayan a convertirse en campaña electoral encubierta y pagada con dinero público. Aunque también es muy posible que a los asistentes a estas jornadas no haya que convencerles de la opción política a votar y entonces no tiene sentido hablar de campaña electoral y de que en realidad hayan servido para que muchos inversores del exterior hayan acudido a la llamada del ayuntamiento para ver que se puede hacer en el pueblo, en cualquier caso estos actos siempre tienen repercusión mediática y por consiguiente un efecto en las urnas, que para eso está el personal de confianza. Esperaremos a realizar una crítica más objetiva cuando el ayuntamiento haya ofrecido el análisis, esperemos que técnico y no político, de las jornadas para evaluar realmente el evento, aunque ya hay alguien que las ha considerado de gran repercusión para su negocio. En fin, que en la ciudad hay más establecimientos de hostelería, que siempre vamos al mismo.
En definitiva de lo que se trata es de ver la forma de cómo se sale de la crisis y se genera empleo y para eso es fundamental la participación activa de todos los agentes implicados en el asunto, aunque dependemos muchísimo de las soluciones a nivel mundial y europeo. No es sólo de políticos y de empresarios. Porque los políticos a veces endiosan a los empresarios y cuando la situación se pone fea, los demonizan y a los empresarios les ocurre exactamente lo mismo con respecto a los políticos y el empresario tiene que tener muy claro de una vez por todas que él, como tal, no crea empleo. El empleo se genera dentro del sistema, que también lo destruye. El empresario es sólo un instrumento del sistema, importante, sí, pero sólo un instrumento que sirve de catalizador dentro del proceso.
Según la página web del ayuntamiento, para la promoción económico disponemos de un Clipe, de un centro de empresas, de una Oficina de Promoción Industrial y de alguna oficina más con nombre parecido y de semejantes atribuciones y quizás hasta atendida por los mismos funcionarios, lo que nos lleva a la conclusión de que tenemos mucha imaginación para bautizar con nombres rimbombantes a herramientas que no sirven para nada y ahí es donde debe entrar la participación.
Particularmente apostaría por un patronato de promoción económica y de empleo, donde queden representados: El ayuntamiento: Gobierno y oposición. Empresarios y Trabajadores. Agricultores y Jornaleros. Ganaderos y Pastores. Maestros, Profesores y Alumnos. Asesores en materia económica, financiera, fiscal y laboral. Deportistas y Amas de Casa y, por supuesto, un Cura.
